
Ámame como a ese viento tembloroso y errante
que busca en los ríos, entre los álamos,
entre las espinosas zarzas,
en las arenas que el sol quema implacable,
sin lastimar mis pies, ni mi amor desnudo,
por la senda cubierta de sauces dormidos…
Ámame como el río que se va
danzando quimeras…igual que yo.
Arráncame la piel a besos con furia acorralada,
talla mi cuerpo con tus labios, moldéame,
que ardan deseos callados en llamaradas,
que tus brazos sean mares tranquilos,
que poco a poco me expriman el alma
quedando como huellas de amor sobre tu playa…
y después déjame vivir la gloria de tu infierno.

No hay comentarios:
Publicar un comentario